Novela de fantasia encuadernada en rústica de 368 páginas más cubiertas.
La novela 23 de la serie del Mundodisco, del genial Terry Pratchett. De fuera vendrán que de casa nos echarán. El reino de Lancre está amenazado por unos invitados poco gratos dispuestos a adueñarse de él… y que no lo consigan está en manos de tres brujas y un (casi) sacerdote. Llega la novela 23 de la serie del Mundodisco.Magrat Ajostiernos, reina de Lancre, ha tenido una hija a la que pondrá nombre en una fastuosa ceremonia en el castillo. Pero han ocurrido tres cosas terribles: 1) el rey ha invitado a todas las familias nobles de los alrededores, incluidos unos vampiros de Überwald; 2) el sacerdote que presidirá la ceremonia es un Omniano, religión que en tiempos antiguos tenía la mala costumbre de quemar brujas en la hoguera; y 3) se ha extraviado la invitación de Yaya Ceravieja, una de las tres brujas del reino. La familia del conde Magpyr no son vampiros corrientes. Son vampiros modernos, es decir, vampyros (con y griega) que han aprendido a emplear el poder del pensamiento positivo para resistirse a cualquier manera de ser dominados. Ya son inmunes a los ajos, la luz del día, los símbolos religiosos, las rodajas de limón y las estacas. Como recuerda siempre el conde a su esposa y a sus díscolos hijos Vlad y Lacrimosa: "Lo que no nos mata, nos hace más fuertes". El objetivo del clan es hacerse con el reino de Lancre para modernizarlo. Han salido del ataúd y quieren un bocado del futuro. Lo que no hace ninguna gracia a las tres brujas: Agnes Nitt (siempre acompañada de su álter ego y voz interior, la petulante Perdita), Tata Ogg y, circunstancialmente (en vistas de que Yaya ha desaparecido), Magrat Ajostiernos están dispuestas a luchar para impedirlo. Carpe Jugulum ("Aférrate a la yugular", el lema en el escudo de armas de la familia Magpyr) está lleno de personajes maravillosos, detalles cómicos.