España, 1620, el Imperio Español alcanza su máximo apogeo, desde el Nuevo Mundo hasta las islas Filipinas, no se pone el sol sobre las tierras de Felipe III. Pero no es posible levantar un imperio sin hacer enemigos poderosos: Francia, Holanda, Inglaterra, Suecia... todos conspiran abiertamente y en secreto para minar el poder español.
Como siempre, los más perjudicados son los más débiles.
El mundo es un lugar peligroso en el que la vida humana vale cada vez menos según se va descendiendo por la pirámide social. Afortunadamente hay individuos extraordinarios que no están dispuestos a quedarse de brazos cruzados ante la injusticia y luchan por proteger a los débiles e inocentes, individuos que forman parte de una organización clandestina llamada la Orden de los Encubiertos.