Como el propio JAN escribe en el prólogo: Empecé este proyecto hace 40 años pero, al no encontrar editor, las primeras 11 páginas se quedaron olvidadas en un cajón. Durante el confinamiento aparecieron por casualidad y, como no me gusta dejar las cosas a medias, me dije que lo acabaría. Este tebeo, Jan lo empezó a dibujar en 1981 y lo terminó en noviembre de 2020. A lo largo de estos 40 años ha cambiado la vida del dibujante, las circunstancias son otras, las herramientas de dibujo son diferentes y todo ello convierte este cómic en una obra imprescindible para todos los seguidores del artista. Con él el sello DQómics empieza la aventura de rescatar obras olvidadas. El creador del célebre Súper López da una vuelta de tuerca a la parodia y, a través de la relación entre un caótico dibujante de cómics y un parado, crea una magistral e hilarante historia que promete continuar en el futuro.