Libro de historietas encuadernado en cartoné de 176 páginas interiores en bitono más cubiertas que contiene una historieta autoconclusiva de ficción sobre la precariedad. Volumen único.
A Carol le pagan por alojarse en hoteles de lujo y valorar, de incógnito, la calidad de sus instalaciones. Omar estudia electrónica en un centro de FP y duerme en la calle. Carol y Omar viven en la misma ciudad y, sin embargo, habitan dos universos distintos. Sus caminos jamás deberían cruzarse. Pero estamos en marzo de 2020, y lo inimaginable está a punto de suceder. “Este cómic –subraya el guionista José Antonio Pérez Ledo– nació el día que mi pareja fue de visita a un centro de Formación Profesional de un barrio de Bilbao. Al volver a casa, me contó que muchos jóvenes sin papeles estudian por el día y mendigan por la noche. Duermen en albergues, en cajeros o al abrigo de un puente. Los profesores, según le dijeron, no tardan en descubrirlo. Chicos aplicados y vitales empiezan a mostrarse conflictivos y taciturnos. Muchos tiran la toalla. Abandonan los estudios y se lanzan a la supervivencia por los medios que sean. Otros resisten”. Durante la realización de El invasor, los autores profundizaron en esa realidad, de cómo algunos de esos chicos logran salir adelante, con su esfuerzo y con la ayuda de una red de buenas voluntades organizadas al margen de las instituciones. Y lo hacen Orbe y Pérez Ledo sabiamente, construyendo una ficción absorbente a partir de esa verdad opacada. Para desarrollar esta obra, Alex Orbe ha contado con una ayuda a la creación por haber sido una de las propuestas ganadoras de una de las becas anuales concedidas por el Departamento de Cultura del Gobierno Vasco.
“En El invasor Pérez Ledo y Alex Orbe hacen un alarde de su maestría como narradores-cazadores a través de un señuelo perfecto que te atrapa como lector para llevarte adonde no te esperabas: una historia llena de humanidad en medio de la adversidad. Lo más extraordinario en medio de lo más cotidiano. Exactamente el tipo de historias de las que andamos tan necesitados. Javier de Isusi